En términos climáticos, «el punto de no retorno» para la viabilidad de la existencia humana generalizada en el medio plazo lo hemos pasado hace tiempo.
Claro que el clima cambia constantemente, y claro que el «punto de no retorno» para un humano es muy diferente al de una bacteria, un hongo, un alga o incluso muchos otros animales. No es que «el planeta se vaya a la mierda». El planeta lleva ahí unos 4000 millones de años y ha pasado por fases muy variadas, y ninguna le ha resultado «crítica». El planeta no prefiere que haya vida ni se ve perjudicado por el lanzamiento de 200 bombas nucleares. El planeta es una cosa, no alguien.
El problema para los humanos y muchos otros organismos es que hemos causado un cambio muy abrupto en un breve espacio de tiempo y los procesos evolutivos de selección natural no se han podido dar de forma paulatina (esto pasa con muchos eventos, como ciertas glaciaciones relativamente rápidas, caída de meteoritos, una actividad volcánica muy intensa…), con lo cual nos vemos incapacitados para «adaptarnos» a semejantes cambios.
Pero yo no veo una posibilidad real de un cambio significativo en este sentido. Ya vemos cómo las crisis económicas hacen que todos tus esfuerzos se vayan a la mierda. Tú dedícate a flagelarte por no reciclar ese envase mientras otros se gastan una millonada en producir misiles (que pagas tú) y enviarlos a países en guerra, con un coste brutal no sólo económicamente sino en términos de recursos usados y ecosistemas contaminados o destruidos.
Por otra parte, la mayoría de los cambios causados, como la alteración de corrientes de aire u oceánicas, derretimiento de los polos, desertización, etc., no son reversibles. Da igual que tú ahora te vuelvas una cavernícola y no compres plásticos ni uses la calefacción jamás, el resultado de la alteración de corrientes oceánicas ya es algo sobre lo que no vas a poder hacer nada, eso no vuelve a su curso previo sólo por que tú dejes de colaborar con el calentamiento global.
La lucha ecologista es una lucha perdida (si entendemos como tal la lucha por evitar cambios bruscos en los ecosistemas fruto de la intervención humana). Hay que asumir una realidad, que es que esto no va a cambiar su tendencia. Puede producirse una ralentización en el proceso (muy modesta, ya que no vamos a poder frenar la expansión del «desarrollo» capitalista) pero este parece inevitable. Y que sufran o mueran los organismos de esta generación o la siguiente no me parece a mí algo relevante. Si se mueren los de esta ya no nacen los de la siguiente y ya ni sufren ni mueren. Incluso si consideramos la muerte como un mal, da igual que un chico muera a los 20 años en esta generación que en la siguiente. Si terminase la existencia de la vida en la Tierra, daría igual que ocurriese hace 3 millones de años, o en 1847, o ahora o dentro de 200 años. El problema a mi entender es si en el proceso de extinción hay organismos sintientes que sufran.
Por eso yo creo que hay que centrarse en luchas a corto/medio plazo que eviten que sufran más individuos, como la lucha feminista o la animalista, por ejemplo (que puede hacerse con estrategias a largo plazo pero también a corto o medio plazo). Cambios en ese sentido ayudarán a muchos millones de individuos de forma muy significativa sin tener que esperar cientos de años cuando no está siquiera muy claro que la humanidad (o al menos gran parte de ella) vaya a durar tanto, o en condiciones que permitan la existencia y éxito de movimientos sociales. El vivir autoengañándose o negando una evidencia con el fin de evitar la desmovilización que produce el catastrofismo puede estar desperdiciando los esfuerzos de millones de personas, que podrían estar ayudando a otrås en lugar de dedicarse a intentar impedir lo ineludible.
Es más importante ayudar a curar sus heridas a quien ha perdido su casa en un incendio que intentar apagar las llamas cuando la casa ha ardido hasta el punto de ser inhabitable. Incluso aunque parezca poner parches en lugar de una solución que vaya a la raíz del problema. La raíz a esas alturas ya da igual.
andressolo 