Cuando yo era pequeño, y hasta el 2001, ver atentados en la tele era algo excepcional. Me acuerdo que de pequeño corría a decirle a mis padres que salía un atentado de ETA en la tele cuando lo ponían en el telediario. Ahora si me pusiese a correr por eso me hacía un maratón.
Las invasiones de Irak (la de los 90 y la otra) y la de Afganistán, la masacre de cientos de miles de personas, la pobreza, la guerra civil y la miseria que crearon hizo que aquello se convirtiese en lo que querían: un cúmulo de odios y conflictos internos que no iba sino a debilitar a esos países, fracturar cualquier posible respuesta unitaria frente al imperialismo occidental y propiciar acciones como las que hemos visto hace unos días en Bruselas. Esto para justificar más invasiones y crear un ambiente de miedo en Europa y EEUU que, por un lado, les permitiese recortar libertades y aumentar el control y, por otro, potenciase sentimientos xenófobos, que ayudan a mantener inmigrantes (o refugiados) alejados.
Hoy una charlatana de estas que tienen por las mañanas en eso que llaman tertulias de la TV, y que suele ser un grupito de fachas que dicen básicamente lo mismo, afirmaba que «los terroristas yihadistas» lo que buscan es terminar con la democracia y con el modelo de vida occidental. Sin embargo en Occidente se producen sólo menos de un 3% de los atentados en el mundo. En Irak, Siria, Afganistán, Pakistán, etc. se están cepillando a gente a puñados todos los días. Y lo podemos ver a diario en la tele. ¿Pero luego nos tragamos que el objetivo de Daesh y Al-Quaeda es terminar con la cultura occidental y sus «democracias»?
No sólo no tenemos memoria de cómo era todo esto antes sino que no tenemos ni memoria de lo que nos han contado esta misma semana o el día anterior. ¿Qué pasa con los atentados que ha habido hoy y ayer en todo el mundo? No existen, simplemente. Porque lo único que existe es lo que nos cuenta la tele. Y lo único que existe es el sufrimiento de las víctimas occidentales. Y la unión debe ser contra el «terrorismo»… que no sea el de estado.
¿Cuánta gente ha muerto en el mar huyendo de las guerras y la pobreza que Occidente ha causado? ¿Cuánta gente ha muerto en esas guerras sin haber podido huir? ¿Quién es el mayor terrorista aquí y quién propicia además otros terrorismos?
Parece mentira que le cuelen algo tan burdo y cantoso a gente supuestamente crítica y concienciada a nivel político. Y es que no hay que ser un gran analista para ver estas cosas. Pero nada, a poner banderitas de Bélgica, que la de Siria es más fea, ¿verdad?
andressolo 