El otro día me quedaba de piedra al conocer el dato de que un 40% de los jóvenes españoles entre 16 y 30 años aprobaría la introducción de la pena de muerte en España. Luego leo publicaciones y comentarios de contactos míos y sigo flipando. Cuando alguien comete un delito con el que están de acuerdo o que A ELLOS no les parece de gran importancia se echan las manos a la cabeza si van a ejecutar a esa persona. «No a la pena de muerte», incluso se atreven a decir personas que en otro momento exigen que quienes cometen delitos que A ELLOS les parecen barbaridades se electrocute, ahorque, decapite, etc. a quien los comete. Yo puedo sentir mucha rabia ante ciertas cosas y puede que si se las hicieran a alguien cercano yo hiciese algo así guiado por el odio. Pero no es algo que defiendo como mecanismo oficial para condenar a nadie. Yo no quiero una sociedad en la que el odio y la venganza tengan cabida en las leyes y la «justicia» (en el mundo del ojo por ojo quien acaba ganando es el más fuerte o el más despiadado). Ya ocurre en este país, pero yo no quiero que eso sea así y mucho menos que las penas sean brutales y tan poco efectivas como es la pena de muerte. La pena de muerte no reduce los crímenes y eso se puede observar en datos de estados que aplican la pena de muerte y otros en los que no existe.
En EEUU, como en casi todas partes, la mayoría de los presos son gente pobre. Y la pena de muerte se aplica sobre todo a gente pobre. Se usa también con fines políticos. Exigir pena de muerte en un país como España es abrir las puertas a una mayor represión contra movimientos sociales. ¿No os basta con ver a quiénes aplican la ley Mordaza y a quiénes no? ¿No veis que Rato o Felipe González están libres mientras se piden 60 años de cárcel para un chico que participó en una agresión que terminó con un guardia civil con un esguince en un tobillo? ¿No veis que muchos policías torturan y asesinan y sin embargo no entran en la cárcel sino que salen absueltos o se les inhabilita durante algún año y punto? ¿No veis que los franquistas dicen lo que quieren mientras quienes comen cárcel y represión son los antifascistas? ¿No veis que violadores a menudo salen a los 3 años, cuando son condenados, mientras que Otegi se ha pasado 6 años y medio por ser un pilar importantísimo en el fin de ETA? ¿A un estado así es a quien le queréis dar el poder de ejecutar a prisioneros?
Quienes tanto exigen que se prohíba expresar ciertas ideas son muchas veces los que luego se comen marrones tremendos por decir lo que ellos piensan. ¿O qué os creéis? ¿Que el estado va a condenar a violadores, policías que torturan o a explotadores de animales pero no a quienes defienden los intereses de los desfavorecidos y oprimidos? Quienes se van a llevar la peor parte con la pena de muerte no van a ser los franquistas, torturadores, violadores, etc. Vais a ser vosotr@s y gente pobre que ha sufrido situaciones terribles en su vida que le han llevado a delinquir por ellas directamente o porque sufren problemas psicológicos como consecuencia indirecta de la pobreza y la marginación, como puede ser en el caso de delitos relacionados con el consumo de ciertas drogas y su estatus de ilegalidad (si fuesen legales no se darían estos problemas).
Seguid dándole armas al enemigo creyendo que las va a utilizar para conseguir lo que vosotros deseáis. Igual cuando os deis cuenta de vuestro error es ya cuando veáis a un compañero sentado en la silla eléctrica.
Buenas hermano, quería compartir mi opinión. La verdad que hablar de pena de muerte es hablar de algo bastante duro, no lo niego. Incluso la cadena perpetua puede ser también estricta. Pero, y ahora parecerá que lo antes dicho no sirve, creo, y igual me equivoco, que la pena de muerte es una opción justa y la barbarie sería más bien el método para llevarla a cabo. Está claro que la pena de muerte a un asesino no devuelve a la víctima a la vida, pero tampoco se puede pedir menos que «pagar por lo que has hecho». La pena de muerte a un violador, a un proxeneta, a un terrorista, a un pedófilo, a un tirano criminal; que además no hay duda que han cometido sus crímenes y no tienen problemas psicológicos, o coacción…; es justo acabar con su vida. Repito que es mi opinión, y posiblemente me equivoce pues hablo de algo bastante serio. No quiero sonar demagogo, pero se ha de admitir que sujetos como ellos son un peligro para la sociedad, personas que en la inmensa mayoría de las veces en las que acaban sus condenas en la carcel vuelven a las andadas. Eso peligra la seguridad de la gente y es más injusto que lo que supuestamente es la misma pena de muerte. En cambio, en el momento en que se ejecuta al delincuente nos olvidamos que haya peligro alguno proveniente de él. Yo no creo tampoco que se deba hacer de manera barbárica (pues entonces la ley no se diferenciaría verdaderamente del sujeto), con lapidación, degüello, electrocución… Solamente hacerle beber un veneno letal. Respeto a quienes no creen en la pena de muerte por el respeto que infunde, porque se crea que no tenemos la potestad de decidir el destino de la gente… y creo que por mí mismo no, pero como sociedad que pretende vivir en paz y escoge por mayoría que eso es justo no lo considero barbarie ni injusto. Que vaya bien.
Hola Manel. Por estudios y datos comprobables en todo el mundo se ha observado que la pena de muerte no reduce el número ni gravedad de delitos. por otra parte, como comento en el texto, quienes se van a llevar la peor parte (y se la llevan) no son los tiranos, los policías que torturan, los violadores, etc. sino la gente pobre y los grupos de movimientos sociales. Dejar la pena de muerte en manos de estados es como darle un bate de béisbol a un neonazi. No lo va a usar para ayudar a los necesitados precisamente. Un saludo!