Otro asesinato adultista. Una niña ha sido degollada por ser considerada una simple cosa, algo que si el asesino rompe servirá para fastidiar a su madre. Le llaman violencia de género porque es una forma de joder a la madre, pero parece que no se presta ni pizca de atención a las víctimas principales de estos hechos: l@s niñ@s. Sufren mucha más discriminación que las mujeres, son agredidås con más frecuencia, son ninguneadås, sometidos, insultadas, humillados, golpeadas, no se tienen en cuenta sus intereses, no se les escucha en juicios que van precisamente sobre dónde o con quién van a vivir… y hasta acaban siendo asesinados «por joder» a otra persona, como quien te rompe el ordenador con todo tu trabajo dentro.
La violencia de género merece toda la atención que recibe, multiplicada por 10. Pero que esto no empañe la violencia más grave ejercida contra humanos: la que sufren l@s niñ@s. Sea en el grupo social que sea, ell@s son quienes menos valen, a quienes menos se escucha, quienes ven cómo la violencia que padecen es minimizada y hasta parece exagerado denunciar a alguien por dar un cachete o una bofetada a un niño.
Decenas de veces he presenciado la situación en la que se dice que un hombre pega a sus hijos y la reacción es de «mecachis…», pero cuando se dice que pega a su mujer entonces aquello es un drama tremendo y algo totalmente inaceptable… Cuando quienes más indefensos están son lås niñås, y son quienes van a arrastrar más problemas toda su vida, derivados de ese maltrato. Y a menudo se comen ese maltrato por parte del padre y también por parte de su madre, quien puede ser víctima y verdugo simultáneamente. Una mujer no es «buena e inocente» por ser maltratada, puede ser igual de asquerosa que su maltratador, siéndolo ella con sus hijås.
